29 mayo 2008

El gran Predicador


Hace tiempo que no digo nada de vinos. Hoy os voy a contar de uno muy bueno que bebí ayer. Es el Predicador, Rioja, 2006. El Bonito lo trajo hace una semana o más a casa pero no lo abrimos (ya tenía otro vino, bastante bueno, abierto). Así que ayer, junto con la cena y la película que pasaron por la TVE1 (la Belle Epoque) lo bebimos.
El Bonito me explicó que este vino, de las bodegas de Benjamín Romeo, es vino "hermano" del vino Contador, que en 2004 fue uno de los primeros vinos españoles que recibieron la medalla de la perfección y los 100 puntos Parker. Así, hemos bebido el hermano pequeño del vino perfecto y la verdad es que ha sido muy bueno. La uva del Predicador es el tempranillo y es muy agradable. Su precio es no muy barato pero vale la pena en momentos especiales en que uno tiene ganas de disfrutar un vino especial.

1 comentario:

Anónimo dijo...

QUIEN PIENSA QUE LOS ROMANOS NO ERAN JUSTOS Y COMPRENSIVOS?...

MARCO PORCIO CATON, CATON EL VIEJO, O EL SENSOR...FAMOSO POR SU RECTITUD MORAL INCORRUPTIBLE Y TAMBIEN POR SU SEVERIDAD DE CARACTER, FUE SENADOR, POLITICO, MILITAR Y ESCRITOR ROMANO...

Precisamente en este ultimo escribió un libro donde desarrollaba todo lo relacionado con la actividad agricola y claro, el trato a los esclavos. «De Agricultura» o «De Re Rústica» son la única obra de Catón que se conserva hoy, ademas estos tratados contienen una colección de normas accesorias sobre las buenas formas conyugales, y tambien contienen información más curiosa aún sobre los hábitos domésticos romanos de su época. Es obvio que caton sostenia la produccion agricola romana y lo practicaba en su propiedad abusando de la mano de obra esclava.

En una oportunidad, recibio en su finca agricola la visita de un magistrado con quien sostenia un lazo de amistad,luego de beber vino en abundancia y saciar el apetito recorrieron juntos el latifundio y comentaban las virtudes y secretos del cultivo de las vastas vides y olivares y beneficios de la tierra... dicho magistrado observo con asombro lo pobre de la vestimenta de los esclavos que trabajaban y sobre todo lo golpeados que estaban, le hizo llegar a Caton sus inquietudes de esta manera:

No habeis abusado del latigo? los habeis golpeado a todos, o es el pobre vestir el que los hace tan miserables a tus vestias?

Caton, medito un segundo y sin sacarle los ojos de los suyos respondio pausada y firmemente:

Aqui teneis techo sustento y vestido, solamente les he dado diez azotes por cabeza... Soy humano.

Asi pensaba Marco Porcio Caton, un verdadero Romano.